Transitar los tratamientos de reproducción asistida, conlleva una fortaleza y resiliencia por parte de los pacientes que lo viven, para poder afrontar la montaña rusa de emociones que experimentan. La nueva comunidad, Voces de la Fertilidad, busca apoyar a personas que han atravesado tratamientos y quieren ayudar a otros en la misma situación.
Desde lo emocional, es necesario preparar a las personas para que puedan transitar, esta experiencia, con una mentalidad positiva y fortalecida. Tanto el diagnóstico como los tratamientos, provocan un gran nivel de estrés en los pacientes, ya que, al continuar siendo un tabú social, lo viven en soledad, sumado a la tristeza, el sentimiento de culpa, vergüenza, incertidumbre, entre otras emociones.
Pero como comentamos al inicio, transitar estos tratamientos conlleva una resiliencia que solo los pacientes de reproducción asistida entienden. Porque luego de cada imprevisto u obstáculo, siguen adelante para lograr su sueño.
Compartir mi experiencia de fertilidad
Son muchos los pacientes que luego de atravesar los tratamientos de reproducción asistida, elijen ayudar a otros con desafíos reproductivos. Ya sea a través de su experiencia profesional, como escritores, psicólogos, ilustradores o abriendo un canal de comunicación a través de las redes sociales comparten su experiencia para poder ayudar a personas que están transitando aquello que una vez, ellos mismos vivieron.
Es hermoso poder ver cómo se va formando una comunidad basada en ayudar al otro, en compartir y poder acompañar a transitar emociones que para muchos son difíciles de explicar.
Por eso, queremos ayudarte a difundir tu mensaje.
Hemos creado una sección en nuestro perfil de Instagram, “Voces de la Fertilidad”, donde compartiremos los perfiles de Instagram, sitios web o marcas cuyo objetivo sea ayudar a personas con problemas reproductivos.
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El impacto del diagnóstico de infertilidad
La llegada del diagnóstico trae consigo la aparición de sufrimiento emocional ya que los pacientes no pueden lograr aquello que tanto anhelan; el deseo de ser padres.
Transitar el deseo de maternidad /paternidad de forma diferente a la imaginada, es lo que dificulta atravesar los tratamientos de fertilidad. Se hacen esfuerzos, se pone empeño, se utilizan todos los recursos y “ganas” disponibles, y el embarazo, aun así, no llega. Según la Lic. Villamil, psicóloga de WeFIV, en estas circunstancias aparecen los primeros desajustes emocionales.
“¿Qué nos está pasando?, ¿por qué no funciona? o ¿qué estamos haciendo mal?”
Frente al diagnóstico, los pacientes entran en un estado de shock donde se produce un desequilibrio que implica una crisis a nivel emocional y, un estado de alarma constante. Las personas se ven expuestas ya que su deseo de ser padres se ve frustrado por causas biológicas que están fuera de su esfera de control.
La vida social: ¿cómo prevenir el aislamiento social?
Es frente al comienzo de los tratamientos de fertilidad, que comienza el aislamiento social y los pacientes eligen no asistir a encuentros con amigos donde saben que se encontrarán con una mujer embarazada o alguien asistirá con sus hijos. Eligen evitar un problema en lugar de afrontarlo. Los pacientes tendrán que elegir cuándo y qué compartir teniendo como prioridad preservar su intimidad.
Es muy común que las personas que se adentran en el camino de la fertilidad decidan mantenerlo en secreto de sus familias, amigos y entorno laboral. Lamentablemente, esto dificulta la posibilidad de apoyo emocional por parte de ellos, forzándolas a vivirlo en soledad y a sentir la presión social de sus seres queridos que desconocen por lo que uno está pasando.
En este momento es cuando aparecen comentarios como: “¿y el bebé para cuándo?”, “¿cuándo voy a ser abuela?”, “relájense que ya van a quedar”. El aislamiento social también se da en respuesta a situaciones como estas.
Por ello, muchos prefieren evitar un problema en lugar de afrontarlo, lo cual es totalmente legítimo. Hacerle frente a la situación no quiere decir contárselo a todo el mundo, aunque uno no quiera. Lo importante es que puedan poner en palabras esto que les está pasando, aunque sea con un grupo íntimo y selecto, para poder atravesar esta situación con el apoyo de sus allegados. El no poder tener un hijo genera muchísimo sufrimiento, pero con el apoyo, aunque sea de un círculo íntimo, es más fácil de sobrellevar.
Vivir la fertilidad en comunidad
Tener la posibilidad de compartir lo que uno está viviendo, sea lindo o triste, ayuda a incrementar ese sentimiento de felicidad o a alivianar la tristeza que sentimos.
Como dijimos anteriormente, el paciente tomará la decisión sobre con quién compartir lo que vive y cuándo hacerlo. A pesar de que la familia y amigos van a querer apoyarlos en este camino, a veces es difícil acompañar a alguien cuando no se ha pasado por esa experiencia.
Por eso, es que creemos que vivir la fertilidad en comunidad, ayuda a transitar las diferentes emociones que los pacientes atraviesan. Ya que se trata de personas que saben lo que es realizar uno o varios tratamientos de reproducción asistida para lograr el embarazo y saben lo que es pedir permiso en el trabajo para ir a una consulta para hablar con el médico sobre los pasos a seguir. Las redes sociales nos ayudan a unirnos en comunidad.
¡No están solos!