Por el Comité Editorial de WeFIV
Hoy en día las mujeres son multifacéticas: hacen muchas cosas a la vez, además de tener un universo enorme de metas en la cabeza, tanto personales como académicas y profesionales. En este contexto, la preservación de la fertilidad es uno de los temas que preocupa a más de una y por el cual recibimos muchas consultas en WeFIV.
En este sentido, la búsqueda de la preservación de la fertilidad tiene que ver tanto con razones médicas como con razones personales, o de la pareja. Inclusive, muchas pacientes recurren a esta técnica porque les ofrece una alternativa más para cumplir su sueño de ser madre a largo plazo, mientras cumplen otros propósitos de vida antes de emprender este maravilloso camino.
Entonces, en nuestro rol de especialistas, las guiamos y les aconsejamos sobre las diferentes opciones que tienen para preservar la fertilidad, y entre los cuales se encuentran la vitrificación de ovocitos o vitrificación de óvulos.
¿Qué es la preservación de la fertilidad?
Al comienzo del artículo abordamos esto como concepto. Ahora, la duda que queda pendiente es: ¿qué es técnicamente la preservación de la fertilidad?
De acuerdo con el Instituto Nacional del Cáncer de los Estados Unidos, se trata de un procedimiento que se usa para ayudar a mantener la capacidad de una persona de tener hijos.
Así -cuando tiene que ver con temas médicos- la preservación de la fertilidad se realiza antes de un tratamiento que puede causar esterilidad, como, por ejemplo, la radioterapia o la quimioterapia.
Entre los ejemplos de procedimientos de preservación de la fertilidad que existen se incluyen la criopreservación de espermatozoides en los hombres; y la vitrificación de óvulos en las mujeres, la criopreservación de embriones y ciertos tipos de cirugía para el cáncer de cuello uterino y de ovario en las mujeres.
Por supuesto que una mujer -asesorada por especialistas- puede decidir preservar su fertilidad, simplemente, como decíamos al comienzo, por cuestiones personales, o sencillamente para tener una opción más disponible el día que desee ser mamá.
Vitrificación de óvulos: ¿en qué consiste?
Esta técnica tiene como principal ventaja posponer la capacidad reproductiva de una mujer sin que por eso se experimente una disminución significativa en la capacidad de concebir ni límite las posibilidades de tener un hijo.
A partir de esta técnica es posible mantener la calidad ovocitaria durante todo el tiempo que dure la vitrificación, situación que genera que la tasa de éxito del tratamiento de reproducción asistida sea más alta.
Esto es lo que marca la diferencia porque la vitrificación que las mujeres llevan adelante a edades más tempranas (preferentemente antes de los 35 años) hace que, la tasa de éxito sea positiva en la mayoría de los casos.
La vitrificación de ovocitos para lograr la preservación de la fertilidad está indicada entonces en:
- Mujeres que por distintos motivos sociales, laborales o personales desean postergar la maternidad.
- Pacientes oncológicas y no oncológicas que van a recibir tratamientos que afecten la reserva ovárica.
- Mujeres que han recibido repetidamente cirugías sobre el ovario.
- Mujeres con baja respuesta ovocitaria.
En cuanto al segundo punto, la Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO por sus siglas en inglés) recomienda que todos los pacientes con cáncer y los padres o tutores de niños con cáncer analicen el riesgo de infertilidad y las opciones de preservación de la fertilidad con sus médicos antes de comenzar el tratamiento contra la enfermedad.
Sobre la importancia de la vitrificación de ovocitos
“Creemos que es sumamente importante que se informe a los pacientes diagnosticados de cáncer que van a recibir tratamiento con quimio o radioterapia acerca de las técnicas de preservación de la fertilidad”, comenta el Dr. Fernando Neuspiller, presidente de WeFIV y agrega que “entre las opciones disponibles para preservar la fertilidad, nosotros recomendamos la vitrificación”.
La técnica de vitrificación debe hacerse antes de comenzar con el tratamiento oncológico. ¿En qué consiste? Se comienza con una estimulación ovárica con medicación para luego aspirar los ovocitos que entrarán en un proceso de vitrificación, en el que serán tratados con una sustancia crioprotectora y sumergidos en nitrógeno líquido a una temperatura de -196°C.
“La principal ventaja respecto a la congelación tradicional es que no se forman cristales de hielo que dañan al óvulo”, asegura el Dr. Neuspiller.
La vitrificación de ovocitos es hoy por hoy la opción más viable para la preservación de la fertilidad en las mujeres que deben someterse a tratamientos de quimio o radioterapia. No obstante, la estimulación ovárica necesaria para la vitrificación puede variar dependiendo del tipo de cáncer y, por supuesto, debe realizarse con el consentimiento del oncólogo.
Una vez que haya finalizado su tratamiento oncológico y haya sido dada de alta, la paciente puede comenzar con el tratamiento de reproducción asistida haciendo uso de sus óvulos obtenidos previamente.
¿Por qué pensar en preservar la fertilidad?
La fertilidad de la mujer es limitada y a partir de los 35 años desciende de forma muy marcada, tanto en número como en calidad de los óvulos. Es un proceso biológico sobre el que, actualmente, no hay nada por hacer.
Sin embargo, dado que la realidad marca que actualmente las mujeres retrasan cada vez más la maternidad, la preservación supone una oportunidad para el futuro.
Si una mujer decide preservar sus óvulos cuando estos son “jóvenes”, en el momento en el que decida que desea tener un bebé podrá utilizar estos óvulos y así tener las mismas probabilidades de embarazo que hubiera tenido en el momento de la preservación.
“Para algunas mujeres, tener un hijo es el sueño de su vida. El embarazo parece ser algo natural que se producirá apenas se suspenda el método anticonceptivo. Sin embargo, muchas veces, aparece la postergación de la maternidad por falta de pareja, por priorizar el desarrollo personal, profesional o académico o por motivos de salud. Y el hecho de no quedar embarazada en el momento que una realmente lo desea, trae aparejado muchas emociones como angustia, estrés, ansiedad, miedo y tener que lidiar con los mandatos sociales”, señala María Villamil, jefa de la Unidad de Apoyo Psicológico de WeFIV.
Por eso, siempre que se realiza cualquier tratamiento de reproducción asistida es recomendable contar con apoyo psicológico, teniendo en cuenta todas las implicancias emocionales que tiene el proyecto de tener un hijo.
“La mujer que decide preservar su fertilidad ve afectada su parte física, social y emocional. Contar con un espacio de apoyo es igual de importante que contar con el espacio de consulta médica, ya que permitirá abordar el proyecto de vida desde lo emocional y, en este caso, lo psicológico ayuda muchísimo para atravesar de mejor manera el proceso”, completa la Lic. Villamil.
¿Qué hay que hacer para preservar la fertilidad frente a una enfermedad?
Según la Sociedad Americana de Oncología Clínica, algunos tratamientos contra el cáncer pueden disminuir la fertilidad o causar infertilidad (incapacidad para tener hijos) en mujeres que aún no han pasado por la menopausia natural.
Asimismo, dichos efectos pueden ser transitorios o permanentes, por lo que es clave pensar en un método para preservar la fertilidad previo al inicio del tratamiento.
Cabe mencionar que el riesgo de infertilidad por el tratamiento contra el cáncer depende de varios factores:
- El tipo y la dosis de fármacos utilizados.
- La dosis de radiación administrada y el lugar del cuerpo donde esta se dirige.
- El tipo de cáncer.
- La edad y el sexo del paciente.
- Si el paciente tuvo problemas de fertilidad antes del tratamiento contra el cáncer.
En el caso de las mujeres que aún no han pasado por la menopausia, debido al cáncer los períodos menstruales pueden hacerse irregulares o interrumpirse durante los tratamientos contra la enfermedad.
Sin embargo, es probable que la fertilidad disminuya, incluso si los períodos menstruales regulares continúan durante el tratamiento o vuelven a presentarse después de este. Además, dichos procedimientos pueden provocar una menopausia prematura, que acorta el período en el cual una mujer puede tener hijos.
En el caso de los hombres, la disminución de la fertilidad puede continuar durante años ya que el cuerpo produce esperma de manera más lenta o ha interrumpido totalmente la producción de esperma.
Cualquiera sea el caso, si crees que es importante preservar tu fertilidad, te esperamos para ayudarte con todas tus dudas en la consulta. Recordá que tenemos a tu disposición un gran equipo médico para acompañarte y guiarte en el proceso.